El secreto del food packaging

Para los consumidores, la regla principal en el mercado se ha vuelto simple: si me gusta lo que mis ojos ven, lo compro. Si el primer contacto que tiene nuestra marca con el mercado es visual y este primer encuentro sucede antes de la compra, el packaging es vital en el canal de distribución. Desde hace mucho sabemos que la función principal de este ya no es proteger el producto, sino atraer a más consumidores. En otras palabras, se ha convertido en un embajador de la marca con la capacidad de venderse por sí solo.

Sin embargo, apenas el shopper entra a un supermercado o pasa por una tienda, son muchas las marcas las que quieren captar su atención. Entonces, ¿qué podemos hacer para que la nuestra destaque? Te contamos algunas maneras de lograrlo y ejemplos de marcas que ya lo han hecho:

Portable

Quizás nuestro consumidor sea de esas personas bastantes ocupadas que la mayoría de comidas las vive dentro de su oficina o en su carro, entonces, nuestro empaque debería ser fácilmente portable. McDonald’s lo logró con “McBike”, una idea que primero se aplicó en Argentina, luego se exportó a Dinamarca y Colombia, y pronto llegará a Amsterdam y Tokio:

Para compartir

Nuestro consumidor puede ser una persona fanática de reuniones sociales, por lo que siempre buscará empaques que le permitan compartir:

Fácil de guardar

¿Quién sabe? También nuestro consumidor puede ser de esas personas que tiene antojos muy seguidos y le gusta tener sus galletas favoritas guardadas en su cajón. Por esto, Oreo lanzó al mercado sus empaques resellables:

Eco – Friendly

Un estudio realizado por Mintel (empresa de investigación norteamericana) confirma que el 80% de compradores en América piensa que el desperdicio de empaques es tan importante como el de los alimentos. Esto se logra fabricando empaques reciclables. Quiznos lo ha hecho y si tu marca aún no da este paso, no es tarde para ser amigables con el ambiente.

Preocupado por la salud

Estamos seguros que has escuchado los términos “gluten-free”, “sugar- free” y más. Nuestra sociedad está cada vez más preocupada por su salud, y busca alimentos que satisfagan dichas necesidades. Esto no solo se trata de resaltar la palabra “light” en el empaque, sino, hacerle saber todos los beneficios que tiene, siempre que lo comuniquemos de una manera inteligente para que ellos puedan escoger con facilidad, como lo hace Cheerios:

Una invitación a la cocina

Las personas ya no cocinan tanto como antes, debido al crecimiento de la preferencia al comer fuera de casa, el acceso al servicio a domicilio (más con las aplicaciones móviles) y otras comodidades más. Sin embargo, aún existe ese porcentaje de gente que disfruta de la cocina, pero siente que se le han acabado las ideas. Para ellos, es útil incluir recetas en nuestro empaque y además, sirve como una manera de decir cómo usar el producto y así, incentivarlos al consumo. ¡Cuántas veces pasa que compran y queda en la alacena por semanas! No es algo nuevo, pero ha sido la fórmula de éxito para marcas como Aunt Jemima que siempre ha indicado las recetas de pancakes, pero ahora va más allá de eso:

Capacidad de personalización

A los consumidores les gusta escoger y cada día se vuelven más independientes Por esto, las compañías crean empaques que permiten a sus consumidores personalizar su comida para que ellos escojan la manera en que la distribuyen. Barilla, con su nueva línea de alimentos preparados, puso en un compartimento la pasta, y en otro, la salsa:

¿Les parece familiar este concepto? Toni lo ha hecho por años con su yogurt y cereal Toni Mix, pero hasta ahora ninguna otra categoría se ha atrevido a replicarlo.

Jugar con estaciones

Decir lo mismo todo el año resulta un poco aburrido. Atrevámonos a jugar con las estaciones, las épocas o las fiestas para decir que nuestro producto es el indicado para esta. Starbucks lo hace todas las navidades cambiando el diseño de sus vasos:

¿Por qué debería hacerlo?

Ya lo dijimos: el empaque es embajador de tu marca. Ya dejaron de ser la envoltura que tiene el regalo adentro, ahora se han convertido en el regalo y una razón por la cual tu consumidor compra tu producto. El empaque tiene múltiples funciones: poder de persuasión, identificación, diferenciación y si hablamos del mercado de los alimentos, una forma de abrir el apetito. Para poder lograrlo, debemos tener una fuerte identidad de marca y un empaque que comunique de manera clara y concisa. No olvidemos que debemos ser creativos, siempre pensando en nuestro consumidor.