¡Arrancó el FICE 2015!
El FICE 2015 arrancó el 11 de mayo en el auditorio de la Cámara de Comercio de Bogotá, con charlas y conferencias brindadas por grandes cabezas de la industria iberoamericana.
Día 1
El primero en adueñarse del escenario fue Sebastián Wilhem, Director General y Socio de Santo. Él habló sobre cómo la lealtad de marca es simplemente un hábito y que (las marcas) tienen que decirle constantemente a la gente: «quiéreme, quiéreme, quiéreme». Pero sin lugar a dudas, lo que más destacó de su intervención fue lo que denominó como el “bullshit” de los casos, de las agencias, de los premios, etc.
“Un caso es algo que sucede, no algo que se arma, es como los virales”, dijo en relación a la forma en que se arman, ya que muchas veces son falsos, o «truchos». Antes de finalizar, reconoció y revaloró el poder de la intuición, “hay que valorar el no se qué”, dijo, «eso que no tiene una explicación lógica». Y puso como ejemplos a las campañas «La llama que llama» y la del gorila de Cadbury. Entre risas dijo: “¿por qué un gorila que toca la batería logró vender chocolates?”.
La Llama que llama
https://youtu.be/2wcWn31S4zU
El gorila de Cadbury
Luego, otra de las conferencias que llamó la atención fue la de Alex Aldas, de Aldasbrand, que abordó el brandketing. Mencionó que estamos pasando de lovemarks a functionalmarks. Definió a las marcas como el proceso de alinear mensajes entre la oferta y la demanda.
Alex también hizo hincapié en que “lo primero que tenemos que tener en cuenta es que una creación efectiva de valor, surge del corazón y mente de los consumidores; son ellos los dueños de las marcas… Les pertenecen”. Antes de irse, habló del antropomarketing y del poder de los insights como herramienta de diferenciación.
Otro de los personajes destacados del primer día de conferencias fue Javier Beltrán, ex Vicepresidente Creativo de la agencia TXT. Lo primero que dijo frente al micrófono fue que hace pocas semanas había dejado su cargo. Su charla se llamó: «Fundamentalismo vs. Radicalismo». Según él, los fundamentalistas llegan a matar por sus ideas, mientras que los otros llegan a morir por las suyas. Para Beltrán esta analogía con la publicidad se resumió en:
‘Para el fundamentalista creativo, la idea está en función de su éxito. Mientras que el radical creativo pule sus ideas; reflexiona sobre si la idea sirve al progreso de muchos y entiende que la creatividad es más grande que la publicidad’.
Día 2
La gran sorpresa de la mañana fue Aldo Quevedo, Presidente de la Asociación de Agencias Hispanas de Publicidad (AHAA), y Director Creativo de Richards/Lerma. Dijo que como latinos hay que estar listos para afrontar la multiculturalidad y puso como ejemplos a Target y Coca-Cola, marcas que a su criterio han entendido el concepto; “hoy las marcas tienen que hablar de forma inclusiva”, comentó. También habló de la influencia de los latinos en EE.UU. a través de la música, moda, comida, en todo. Además, mencionó que una idea no es responsabilidad del creativo, sino de todos en las agencias: cuentas, medios, etc.
Pero sin lugar a dudas, lo que dejó a más de uno verdaderamente emocionado fue la presencia de Carlos Baccetti. Mostró comerciales hechos hace más de 15 años, que erizaron a más de un millennial en el auditorio, demostrando el motivo por el que muchos lo consideran una verdadera leyenda.
Dijo que para una agencia, el cliente tiene que ser un socio, o una pareja. Pero también dijo que “el cliente no es el rey, es DIOS, y con DIOS se puede hablar”. Del mismo modo arrancó aplausos cuando dijo que los briefs no son sagradas escrituras; ya que cada uno tiene diferentes interpretaciones.
Para Baccetti “la publicidad no vende, hace dar ganas de comprar… Somos la poesía del comercio”. Y dejó a todos los presentes emocionados con dos mensajes potentes: hay que poner todo en duda, “dudar del brief, del cliente, hasta de la educación de mis hijos (risas)”, agregó. Y por último dijo que las empresas no deben tener un sólo tono, ya que en sus palabras, nadie habla de la misma forma siempre, “no hablo de la mismo forma con ustedes (refiriéndose a la audiencia), que cuando lo hago con mi esposa o los clientes”.
Antes de irse entre aplausos dijo que la forma en que cuentes una idea es más importante que la idea. Vender ideas es algo que muchos profesionales olvidan, y bromeo diciendo que hoy sería millonario si se hubiera dedicado a ser vendedor.
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