10 maneras de crear espacios colaborativos
Siempre que pensamos en espacios de colaboración, nos imaginamos las oficinas de Google. Es una de esas empresas que ha logrado maximizar el proceso de innovación, y ha diseñado cada rincón, mueble, ventana y demás con una visión en mente: la del trabajo en equipo.
Claro que el resto de nosotros no siempre tiene el presupuesto para remodelar de pies a cabeza una oficina. ¿La buena noticia? No es necesario. Resulta que se puede optimizar lo que ya tienes de muchas maneras, y así transformar tu oficina (aunque tenga cubículos) en un paraíso de la colaboración y la innovación.
Empieza con lo que ya tienes
Amazon y Apple empezaron su historia en un garaje. No se trata de grandes oficinas, lujosas y hermosamente decoradas, sino de declarar su propósito. Toma un espacio, decide que ese será el lugar para desarrollar nuevas ideas y hazlo saber a todos.
Reúne a las personas que ya están interesadas
En toda empresa hay personas menos o más resistentes al cambio. Elige un grupo de personas que crean firmemente en la necesidad de innovar y deja que sean ellos quienes peleen en tu misión. Recuerda que las revoluciones empiezan de abajo hacia arriba.
Empodera a tu equipo a cambiar
Alguien en los altos mandos de la compañía deberá apoyarte, pero es necesario que tu equipo esté dispuesto a cambiar las cosas. Así sea algo tan sencillo como la configuración de su espacio. Empiecen a probar qué funciona mejor.
Observa el comportamiento del grupo
Haz que alguien se encargue de esta tarea si no puedes hacerlo tú mismo, pero no dejes de hacerlo. Para que la innovación funcione necesitas comprender qué está pasando. Prueba, reflexiona y modifica las veces que sea necesario.
Haz las cosas en tamaño gigante
Olvídate de las hojas de Excel subidas en la nube para que todos los miembros del equipo puedan verla. Mejor es tomar una pizarra o usar una ventana y escribir tus ideas lo más grande posible, para que todos en equipo puedan verlas todo el tiempo.
Mantén las cosas en baja resolución
No intentes formalizar todo demasiado rápido. Si tienes una buena idea, haz un prototipo, borrador o artefacto sencillo. No te compliques, no la conviertas en algo “preciado” porque se genera la sensación de que es inamovible. En resumen, no pierdas la oportunidad de ver mejoras potenciales y hacerlas.
Muestra tu proceso de trabajo
Esto no sólo permite que todos se sientan conectados a lo que están creando y motiva a seguir trabajando duro, sino que abre las puertas a críticas que podrían mejorar las ideas. Permite que todos comenten, pero deja claro que estos deben constructivos.
Invierte más en espacios comunales
Olvídate de las grandes oficinas para los jefes. Si quieres que tu equipo sienta que el esfuerzo y los beneficios son para todos, dale prioridad a los espacios comunales. Puede ser algo tan pequeño como remodelar los baños o la cafetería, o tan grande como construir salas para pensar en equipo.
Mezcla las opciones de asientos
Deja que cada persona elija dónde quiere sentarse y crea diferentes ambientes utilizando puffs, sillones, sillas altas, etc. Des-estructura las reuniones sentando al líder en el medio (en lugar de en la cabecera), o haz que la reunión sea todos sentados en círculo en el piso, o todos parados, etc.
Haz que generar y capturar ideas sea fácil
Cualquier superficie plana puede ser una pizarra. Existen materiales adhesivos que puedes colocar sobre puertas, paredes o mesas para escribir las ideas cada vez que surjan. Las ventanas también son una gran opción. No está de más decir que es necesario siempre tener marcadores a la mano.
La creatividad e innovación responden a un contexto. No se necesita invertir millones de dólares en modificar una oficina para que estas surjan. Pero sí es imprescindible incorporarlas en las actividades diarias de tal forma que no se sienta como una tarea adicional, sino como parte de todos los procesos. Para generar espacios colaborativos y que la innovación surja en tu empresa, haz click aquí y descubre el poder de la co-innovación.