Creatividad para luchar contra el Alzheimer
Con el fin de conmemorar septiembre, el mes del Alzheimer, y empujar la conciencia pública hacia el descubrimiento de una cura, muchas agencias utilizan su creatividad. Generar conciencia sobre esta enfermedad no es tarea fácil. Por un lado, muchas personas han tenido a alguien que la ha sufrido. Es decir, se sabe que es una condición progresiva y degenerativa que destruye poco a poco las neuronas del cerebro. Por otro lado, no ha habido suficientes avances en la ciencia como para erradicar este padecimiento o controlar sus síntomas. Y esto hace que sea necesario seguir hablando sobre sus efectos.
Santa forgot?
Una animación perturbadora y hermosa imagina un mundo donde la magia de la Navidad se ha perdido porque Santa vive con los efectos de la demencia y ya no visita a niños de todo el mundo en Navidad. El concepto llama la atención y destaca los síntomas variados (entre ellos el aislamiento social). Además, demuestra que el Alzheimer puede golpear indiscriminadamente, incluso a Santa. El mensaje central es que «si Santa tiene una enfermedad, la investigación puede encontrar una manera de arreglarlo».
Chat Yourself
Este año vimos a esta aplicación creada para mejorar las vidas de quienes tienen una etapa temprana de Alzheimer llevarse un Bronce en Pharma, en el festival Cannes Lions. Chat Yourself es un chatbot de Facebook creado para grabar y recordar cosas. Utiliza toda la data que una persona acumula en sus redes sociales para alimentar la información que el chat es capaz de proveer al usuario. El concepto demuestra las enormes oportunidades tecnológicas que hay disponibles, sobre todo en el campo de la salud.
The day Shazam forgot
Si el móvil es nuestra tecnología más íntima, es lógico que pueda usarse para recordarnos nuestra humanidad. Por esto, Alzheimer’s Research U.K., junto a la agencia Innocean Worldwide UK, le dieron un atributo terriblemente humano a Shazam: la habilidad de olvidar. «The Day Shazam Forgot» fue una colaboración en la que Shazam parecía tener problemas para recordar las canciones que la gente le pedía que identificara. Cuando la aplicación finalmente «recordó» el nombre de la canción, los usuarios fueron llevados a un call-to-action sobre la enfermedad e invitados a donar a la causa.
Historias eternas
Publicitas Saatchi & Saatchi, en conjunto con la Fundación TASE, han lanzado ”Historias Eternas”. Esta campaña está compuesta de 4 historias, cada una con un personaje ficticio: “La vida de Eduardo: una leyenda del fútbol”; “Me llamo Narcisa: la vendedora de aspiradoras”; “El Diario de Genoveva: cómo ser una madre y padre en el Cenepa”; “Soy Mario: atrapando cangrejos durante 30 años”.
Cada historia está plasmada en un libro que muestra cómo afecta la enfermedad a sus protagonistas. Y es que, tal como pasa en la realidad, los personajes van perdiendo la memoria de a poco a lo largo de las páginas de cada libro.
Conversamos con los creativos de Publicitas Saatchi & Saatchi detrás de esta iniciativa (izquierda: Memo Valverde, Director Creativo; derecha: Abel Ochoa, Director de Arte)
¿Qué los motivo como equipo a trabajar una campaña relacionada al Alzheimer?
Memo Valverde: Publicitas Saatchi & Saatchi trata de tener, al menos, una campaña de bien social al año. En 2015 fue «Social Blood» y el año pasado trabajamos «Cuentos de Libertad», proyecto que sigue en su segunda fase de desarrollo. Antes de cada campaña social hacemos una investigación y escogemos un tema que sea relevante. De hecho, éste es el segundo proyecto sobre el Alzheimer que hemos desarrollado en el año. La primera fue “Unknown team”.
¿Cuál fue el insight principal de esta campaña?
Abel Ochoa: Más allá de un insight, #HistoriasEternas busca que la gente experimente cómo es vivir con Alzheimer. Muchas personas han tenido un familiar o conocido con esta enfermedad, entonces el mensaje se vuelve más emotivo aún. Sólo necesitas pasar las hojas en blanco para decodificar la idea y darte cuenta que donde hubo una historia de vida ya no hay nada. Con los libros supimos dar el giro creativo que llame a la conciencia, que era lo que buscábamos. En el momento en que cada persona atesora esas historias que algún día se perdieron hace que perduren en el tiempo y las vuelvan eternas.
Nos sorprendió el recurso del libro en vez de un medio digital, ¿por qué lo hicieron de esta manera?
Abel Ochoa: El libro de papel, lo analógico, estimula más la nostalgia. Los alemanes denominan fernweh a la nostalgia de lo que no conocemos todavía y creo que la idea va por ahí. Una colección de libros autobiográficos con sus páginas en blanco es la metáfora perfecta del Alzheimer. Esto no quiere decir que en próximas instancias no nos acerquemos al mundo digital. Podría ser a través de Amazon, Spotify o Scribd para fortalecer la campaña.
Desde su perspectiva, ¿por qué cuesta tanto a la industria local impulsar campañas de responsabilidad social con gran impacto usando pocos recursos?
Guillermo Valverde: Primero, porque no son rentables a corto plazo, y segundo, porque para ejecutar este tipo de ideas con pocos recursos se necesita invertir mucho tiempo. En lo personal creo que cuando se hace este tipo de ideas solo para participar en festivales no genera el impacto social que debería porque el foco y la energía está puesta en el festival.
Estas campañas, sin duda, logran generar una respuesta emotiva muy fuerte. Y al final, a veces esa es la clave para despertar la voluntad de informarse al respecto y buscar formas de ayudar. ¡Bravo!