Los ingredientes para unas vallas deliciosas
Creatividad y alimentos son los ingredientes principales. ¿El resultado? Deliciosas vallas, en las que la publicidad se nutre de la comida real para atraer a los consumidores y engancharnos con algo fuera de lo común.
Te presentamos, de la mano de Hubspot, algunos ejemplos de cómo las marcas han llevados sus alimentos a la publicidad, con un toque de creatividad.
Mr. Kipling
Una valla hecha completamente con dulces. Esa fue la propuesta de Mr. Kipling, una compañía británica de pastelería. El anuncio, que es también una obra comestible, fue elaborado con la ayuda de la artista Michelle Wibowo y con la suma total de 13.360 pastelillos. El montaje tomó cerca de 7 horas.
McDonald’s
Desde hace un tiempo, esta cadena de comida rápida intenta posicionar otro alimento en su menú: las ensaladas. En un esfuerzo para promoverlas, resaltando la utilización de ingredientes frescos en su elaboración, nació esta valla. El anuncio cuenta con miles de cabezas de lechuga, que fueron plantadas y crecieron en el lugar.
Otra propuesta creativa de esta marca fue la realizada en una mini valla en Países Bajos. La estructura tenía un sensor de temperatura y decenas de McFlurrys por dentro, con un vidrio y seguridad. Cuando la temperatura exterior alcanzó los grados determinados por la marca, la ventana se abrió, permitiendo a los transeúntes que pasaban por ahí, tomar un helado.
Coca-Cola Zero
75 válvulas, cuatro bombas de alta presión, 16 sensores y 23.000 litros de Coca-Cola Zero hicieron de esta valla algo inolvidable. El anuncio fue colocada en Indianápolis, en el White River State Park durante una importante competencia deportiva local.
La valla sirvió como un «anuncio bebible», pues estaba equipado de tal manera con un sorbete gigante que, a manera de ducto, permitía el paso de la bebida a una fuente pública.
Carlsberg
Otra valla con bebida incluida, esta iniciativa de la marca de cerveza Carlsberg fue colocada el pasado abril en Londres. La estructura incluía un dispensador de cerveza, del que los transeúntes pudieron servirse la bebida y consumir de manera gratuita.